No importa que no seas especialista en salud ocular o que no acudas con frecuencia a la revisión de tu vista, seguramente alguna vez has escuchado el término “desprendimiento de retina”, el cual es uno de los accidentes más graves que se pueden presentar en el ojo, y el cual, por su propio nombre, nos advierte de una condición grave que debe ser atendida urgentemente si es que se presenta.
Sin embargo, ¿qué es exactamente un desprendimiento de la retina del ojo, por qué se produce y cuáles son los riesgos que esto implica para nuestra salud y nuestra vista? En Quitateloslentes.com te contamos todo al respecto.
La retina se trata de la capa de tejido sensible a la luz que se encuentra en la parte posterior de nuestro glóbulo ocular, la cual juega un papel indispensable en el enfoque de las imágenes y la transmisión de estas al cerebro para que puedan interpretarse las formas, colores y movimientos.
La luz de las imágenes que pasan a través del cristalino del ojo se enfocan en la retina. La retina convierte entonces estas imágenes en señales eléctricas y las envía por el nervio óptico al cerebro para que podamos procesar los que percibimos del entorno a través del sentido de la vista.
La retina por lo general tiene un color rojo o anaranjado debido a que hay muchos vasos sanguíneos justo detrás de ella.
Como su nombre lo indica, un desprendimiento de retina se trata de un trastorno en el que esta capa del ojo se desprende del sitio en el que se encuentra regularmente causando dolor y dificultades para ver.
Esta condición generará graves problemas para enfocar las imágenes que pasan a través del globo ocular y propicia que la visión sea muy borrosa, amenazando con inclusive la pérdida de la vista.
Por la gravedad de este padecimiento, debe ser evaluado y atendido de inmediato por un médico oftalmólogo, pues de lo contrario los daños a la retina y el nervio ocular pueden ser irreversibles, teniendo como consecuencia la disminución considerable de la visión o la pérdida total de la misma.
Una de las causas más comunes del desprendimiento de retina es la edad, pues a medida que el cuerpo envejece naturalmente, el vítreo en nuestros ojos se empieza a encoger y a hacerse más delgado. Al moverse el ojo, el vítreo se mueve alrededor de la retina sin problemas. No obstante, con el envejecimiento, el vítreo puede pegarse a la retina y jalar lo suficientemente fuerte como para desprender la. En estos casos, el líquido puede pasar a través del desgarro y levantar (desprender) la retina.
El tipo más común de desprendimiento de retina con frecuencia se debe a un desgarro o perforación en esta capa. A través de estos desgarros se pueden filtrar los líquidos naturales del ojo. Esto causa la separación de la retina de los tejidos subyacentes.
Esto casi siempre se debe a una afección llamada desprendimiento vítreo posterior. También puede ser causado por un traumatismo y una miopía muy grave. También hay que tomar en cuenta que contar con antecedentes familiares de desprendimiento de retina también aumenta el riesgo de sufrirla.
También existe el desprendimiento de retina por tracción, la cual ocurre por causa del desprendimiento de tejido cicatrizado. Este tipo ocurre en personas con diabetes no controlada, que tienen antecedentes de cirugía de retina o que tienen inflamación prolongada (crónica).
Cuando se presenta un caso de desprendimiento de retina, el posterior sangrado proveniente de los vasos sanguíneos cercanos va a causar opacidad en el interior del ojo, de manera que el paciente no vea claramente o que no vea en absoluto ya que la visión central puede resultar seriamente afectada si la mácula se desprende. La mácula es la parte de la retina responsable de la visión fina y detallada.
Un desprendimiento de retina puede presentarse en personas de todas las edades, sin embargo resulta más común en personas mayores a los 40 años.
También hay que considerar que este padecimiento afecta más a los hombres que a las mujeres y más a blancos que afroamericanos. Las personas que presentan más riesgos también cuentan con características, como:
Antecedente | Descripción |
Miopía extremadamente alta (Miopía magna) | también conocida como alta miopía, se caracteriza por tener más de 6 dioptrías (Unidad de medida en la graduación de los ojos)
Es la forma más grave de miopía. |
Ya han sufrido un desprendimiento de retina en el otro ojo | Si el paciente ya ha sufrido previamente de un desprendimiento de retina, es cuestión de tiempo para que la retina de su otro ojo se desprenda también, especialmente si la causa del desprendimiento es la edad avanzada del paciente |
Tienen antecedentes familiares de desprendimiento de retina | Si los padres, abuelos o bisabuelos del paciente sufriendo de desprendimiento de retina, es más probable que el paciente llegue a sufrirlo también a una edad avanzada |
Se han sometido a una cirugía de cataratas en México | En ocasiones, después de una cirugía de cataratas, la retina puede resultar afectada, lo que facilita su desprendimiento |
Tienen otras enfermedades o afecciones de la vista o del ojo | Enfermedades como la retinopatía diabética o la degeneración macular pueden causar daño a la retina, lo que facilita su desprendimiento |
Han sufrido una lesión en el ojo | Sufrir algún tipo de accidente en el ojo, como una caída o un rasguño profundo, pueden dañar e incluso arrancar la retina. |
Para evitar un desprendimiento de retina es importante que la población de riesgo se someta a revisiones oculares periódicas, como mínimo, una vez al año, ya que si el desprendimiento de la retina es diagnosticado a tiempo, es más fácil para los médicos tratarlo y es más probable que logren salvar la vista del paciente.
Además de las visitas periódicas al oculista, también es importante estar al pendiente de cualquier síntoma que pueda ser indicativo de un inminente desprendimiento de retina. Síntomas como la aparición súbita de moscas volantes o un aumento brusco de las ya existentes, así como la aparición de destellos luminosos o de cualquier otro de los síntomas que serán descritos más adelante, debe ser motivo de consulta urgente con un oftalmólogo.
Los síntomas más comunes de un desprendimiento de retina del ojo incluyen un aumento de flotadores (pequeños puntos o manchas que aparecen en la visión de una persona, o destellos de luz en los ojos). También, puede sentir la sensación de que existe una “cortina” en su campo de visión, así como una disminución considerable en la visión periférica y sangrado en el humor vítreo (gel transparente que llena la cavidad posterior del ojo, entre la retina y el cristalino) La cual es una sustancia que está compuesta principalmente por agua, proteínas, ácido hialurónico y colágeno.
En caso de que aparezcan súbitamente cualquiera de los síntomas previamente mencionados, especialmente los destellos luminosos (pues pueden indicar un posible desgarro o rotura de la retina) se debe acudir de inmediato con el oftalmólogo para que esto sea tratado precozmente con una fotocoagulación retiniana y evitar un posterior desprendimiento de retina.
En el caso de que ya tengamos un desprendimiento de retina establecido, el tratamiento será casi siempre quirúrgico y no hacerlo de modo urgente podría conllevar la pérdida irreversible de visión del ojo.
Es de suma importancia realizar revisiones de forma periódica, como mínimo una vez al año en población general y de 2 a 3 veces al año en población de riesgo. También es esencial revisar la retina del ojo contralateral de los pacientes con antecedentes personales de desprendimiento de retina, para poder detectar lesiones periféricas de riesgo y tratarlas preventivamente, antes de que desarrollen dicha enfermedad.
Si bien los síntomas de un desprendimiento de retina son bastante claros, si es indispensable que el diagnóstico sea dado y confirmado por un médico oftalmología.
En caso de que se sospeche de un desprendimiento de retina siempre será necesario un diagnóstico por parte de un oftalmólogo profesional, quien a través de instrumentos de observación o exámenes, podrá determinar si esta se esta esta sufriendo un desprendimiento y cuál es la gravedad del daño en la retina.
Su oftalmólogo le coloca gotas en el ojo para dilatar (ensanchar) la pupila. Luego, observa por medio de un lente especial para ver si la retina tiene algún cambio.
Existen varios tratamientos para el caso del desprendimiento de retina, en su mayoría son tratamientos quirúrgicos como lo son:
Tratamiento | Descripción |
Retinopexia neumática | El oftalmólogo coloca una burbuja de gas en el interior del ojo, esto empuja la retina y la coloca en su lugar para que pueda sanar adecuadamente.
Posteriormente el paciente deberá mantener la cabeza en la posición específica que su médico recomiende durante varios días para que, de esta forma, la burbuja permanezca en el lugar correcto. A medida que se cura el ojo, el cuerpo produce el líquido que llena el ojo. gradualmente, este líquido sustituye a la burbuja de gas.
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Vitrectomía: | El oftalmólogo retira el vítreo que jala de la retina, el vítreo será posteriormente reemplazado por una burbuja de aire, gas o aceite, esto con el fin de que la burbuja empuje la retina y la coloque en su lugar para que pueda sanar adecuadamente.
Si se utiliza una burbuja de aceite, el oftalmólogo la extraerá unos meses después. Usted no puede viajar a lugares de alta altitud ni bucear si le han colocado una burbuja de aire o gas, esto debido a que un cambio de altitud hace que el gas se expanda y aumente la presión ocular lo que puede causar complicaciones más graves e incluso ceguera permanente |
Bucle escleral: | Se cose una banda de goma o plástico blando en la parte exterior del globo ocular, está presionará levemente el ojo hacia adentro.
Esto ayuda a que la retina despegada selle contra la pared ocular. En general, se deja de manera permanente en el ojo ya que esta goma no causa ningún tipo de interferencia en la vista del paciente
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Independientemente de cual sea el tratamiento, ese siempre debe ser realizado por un cirujano oftalmólogo con el equipo y certificación adecuados.
Como sabemos, todas las cirugías oculares tienen un cierto nivel de riesgo, sin embargo en el caso particular de una cirugía por desprendimiento de retina, las consecuencias de un mal cuidado son bastante graves, pudiendo llegar incluso a perder la visión rápida y permanentemente.
Entre los principales riesgos y complicaciones que se puede presentar en este tipo de cirugías, se encuentran: