

Miopía magna: causas y tratamientos
La miopía magna es una condición ocular que va más allá de la simple dificultad para ver de lejos. Se trata de un tipo de miopía severa que puede comprometer la estructura del ojo y aumentar el riesgo de desarrollar otras enfermedades visuales graves, como el desprendimiento de retina o la degeneración macular miópica.
Reconocer sus síntomas y buscar atención oftalmológica temprana es clave para preservar la visión.
¿Qué es la miopía magna?
La miopía magna, también conocida como alta miopía o miopía patológica, es más que un simple defecto refractivo que dificulta la visión de lejos. Se define cuando el error refractivo es superior a las -6 dioptrías o cuando la longitud del globo ocular (eje anteroposterior) es mayor a los 26 o 26.5 milímetros.
Esta condición se produce por un alargamiento excesivo del globo ocular. A medida que el ojo se estira, sus estructuras internas, como la retina y el coroides, se adelgazan y debilitan, lo que incrementa significativamente el riesgo de desarrollar patologías oculares graves.
Los síntomas, además de la visión lejana muy borrosa, pueden incluir:
- Moscas volantes (miodesopsias), que son manchas o hilos que parecen flotar en el campo visual.
- Destellos de luz (fotopsias).
- Disminución progresiva de la agudeza visual.
- En casos más avanzados, la aparición de una sombra o cortina que cubre parte del campo visual, indicando posibles complicaciones serias.
¿La miopía magna se puede operar?
Sí, la miopía magna se puede operar para corregir el defecto refractivo (las dioptrías) y mejorar la visión de lejos, pero es crucial entender que la cirugía no elimina el riesgo de desarrollar las complicaciones degenerativas asociadas a esta patología. La cirugía busca la independencia de las gafas o lentes de contacto, pero el ojo permanece con su alargamiento original.
Las opciones quirúrgicas más comunes incluyen:
- Cirugía refractiva con láser (LASIK o PRK): Se utiliza para moldear la córnea, pero no siempre es la mejor opción en ojos con córneas muy finas o miopías extremadamente altas.
- Implante de Lentes Intraoculares Fáquicas (ICL): Consiste en colocar una lente especial dentro del ojo, entre el iris y el cristalino, sin necesidad de retirar este último. Es una técnica reversible y a menudo preferida para graduaciones muy elevadas.
- Cirugía de cristalino con implante de lente intraocular (LIO): Se realiza cuando la miopía es muy alta y/o cuando ya ha aparecido una catarata.
En caso de complicaciones como el desprendimiento de retina o el agujero macular, se requieren cirugías vitreorretinianas específicas para tratar dichas patologías y preservar la visión.
Miopía magna degenerativa: causas y tratamientos
La miopía degenerativa o patológica es la evolución más grave de la miopía magna. Su principal causa es la predisposición genética combinada con el crecimiento descontrolado del globo ocular, que estira y daña la retina y la coroides.
Causas:
- Factor Genético: Es el más determinante. La herencia juega un papel clave en la longitud axial del ojo.
- Factores Ambientales: El tiempo prolongado dedicado a tareas de visión cercana (lectura, pantallas) y la falta de tiempo al aire libre se asocian a un mayor riesgo de desarrollo y progresión de la miopía.
Tratamientos: Actualmente, no existe una cura para revertir el alargamiento del ojo ni detener por completo la degeneración, por lo que el tratamiento se enfoca en manejar y controlar las complicaciones a medida que aparecen:
- Degeneración Macular Neovascular: Se trata con inyecciones intravítreas de fármacos anti-angiogénicos (Anti-VEGF) para detener el crecimiento de vasos sanguíneos anormales bajo la retina.
- Desprendimiento de Retina y Agujero Macular: Requieren cirugía vitreorretiniana de urgencia.
- Lesiones periféricas de retina: Pueden ser tratadas preventivamente con fotocoagulación láser.
El control periódico con el oftalmólogo, incluyendo un examen detallado del fondo de ojo, es la herramienta más importante para la detección precoz de estas lesiones.
¿Se considera la miopía magna como discapacidad?
En algunos casos, la miopía magna puede considerarse una discapacidad visual, especialmente cuando la agudeza visual no mejora con lentes o cirugía.
En México y en otros países, se considera discapacidad visual grave cuando la visión corregida es igual o inferior a 0.3 (30%) en el mejor ojo, o cuando hay lesiones irreversibles en la retina o el nervio óptico asociadas a la miopía magna.
Esto puede dar derecho a apoyos o beneficios sociales y laborales, dependiendo de la legislación vigente. La valoración debe realizarla un oftalmólogo certificado mediante exámenes de fondo de ojo y agudeza visual.
Miopía magna y cataratas
Existe una clara asociación entre la miopía magna y el desarrollo precoz de cataratas. Los pacientes con alta miopía tienen un riesgo significativamente mayor de desarrollar esta opacificación del cristalino a una edad más temprana en comparación con la población general.
La miopía magna, debido al estrés mecánico en el ojo, puede acelerar el proceso de envejecimiento del cristalino. Cuando la catarata es lo suficientemente densa para afectar la visión, se realiza una cirugía de catarata.
Esta intervención consiste en extraer el cristalino opaco y reemplazarlo por una Lente Intraocular (LIO) artificial. En el miope magno, esta cirugía es particularmente delicada debido a las posibles complicaciones retinianas (como el desprendimiento de retina) que pueden surgir tras la operación. Por ello, el implante de la LIO debe ser cuidadosamente planificado por el especialista, y el paciente debe mantener un seguimiento estricto post-operatorio.